viernes, 31 de julio de 2015

Fases por las que pasa una relación en Twitter

Las redes sociales son como la casa de Gran Hermano (sí, lo sé, muchas referencias últimamente). Todo se magnifica. Nos creemos que eso es el mundo real. Los sentimientos están a flor de piel y las emociones brotan cual hortigas.

El mundo 2.0 es más rápido que el 1.0 y amistades que en la vida real tardarían varios meses en forjarse en las redes sociales lo hacen en un par de semanas. En menos de un mes hemos descubierto a nuestra alma gemela y luego...

Hoy os presento las fases por las que pasa una relación en Twitter. Ya sabéis, basado en hechos reales pero con un toque de humor.
1. Descubrimiento. A diferencia de Facebook, por ejemplo, en Twitter puedes hablar con gente que no conoces absolutamente de nada, que vive a cientos de kilómetros de distancia y a partir de ahí descubrir que tenéis mogollón de cosas en común. Desde que de pequeños veíais la misma serie de dibujos random a que desayunáis lo mismo para luchar contra el estreñimiento.

2. Amistad. A partir de lo que tenéis en común (nunca fijándoos en todo lo demás que os separa) forjáis una relación de amistad que se afianza. Apenas habláis de nada más de lo que tenéis en común y cuando os salís del tema procuráis buscar aquello en que creeis podéis tener afinidad.

3. Enamoramiento. No me refiero a un enamoramiento de pareja, ni siquiera tiene que haber atracción sexual. Pero sí que empezais a sentir una atracción por la otra persona que os hace darle los buenos días y las buenas noches a diario y preguntarles por cómo le ha ido la visita de su gato al veterinario.

4. Necesidad. De ahí se despierta una necesidad por abrirte a ella y contarle los últimos cotilleos de la red o cosas tan banales como el atasco que te has tragado para llegar al curro. Recuerda vuestra relación se mueve en parámetros 2.0 y puede que nunca salga de ahí.

5. Sospechas. ¿Si sabe que fulanito te cae mal y el otro día le estuviste comentando lo antipático que es cómo osa siquiera dirigirle la palabra? Y aparecen los celos 2.0, que pueden ser aún peor que los 1.0 porque resultan absurdos. Y tú sabes que son absurdos, pero aún así ahí están.

6. Dónde está y con quién. En ocasiones (ojo que no digo siempre) empiezas a mosquearte porque tu BBF no te ha dado los buenos días o porque le ves que interactúa demasiado con otro usuario de Twitter. Así que como cualquier persona celosa sacas lo peor de ti mismo y empiezas a espiarle en busca de tuits que muestren conversación con otras personas que no te gustan o RTs que demuestren que sus sentimientos no son tales como tú creías.

7. Enfriamiento. A partir de ahí las cosas se enfrían y habláis menos. Cada vez menos. Primero porque te mosqueas, luego porque te mosquea que él no se haya molestado con tu mosqueo y haya querido arreglar las cosas.


8. Todo te parece mal. Incluso lo que hizo que te prendaras de esa persona ahora te repatea. ¿Cómo puede repetir las mismas quejas cada dos días? ¿Está lanzándote indirectas con ciertos tuits en los que acusa sin decir a quien?

9. Silencias. Llega el punto en que por tu bienestar mental (y por minorizar las posibilidad de hacer el ridículo 2.0) decides silenciar a quien fue tu BFF. Ojos que no ven...

10. Unflollow. Tiempo después te das cuenta que si lo tienes silenciado es tontería seguir siguiéndolo, así que te armas de valor y unfollow. Y ya el último paso para la desaparición definitiva -reservado para los más valientes- es el block, para que ni siquiera pueda preguntarte qué ha pasado.

1 comentario:

  1. Lo peor es cuando de amigo 2.0 pasas a amigo 1.0 y de eso a muy buen amigo, pero por cosas de la vida, acabas desencantado con esa persona a nivel 1.0. El tránsito del 1.0 al solo-2.0 ya es raro, y al final cada vez que lees un tuit suyo, o PEOR os hacéis unos replies, sientes que hay un elefante enorme en el time line. El elefante de "fuimos amigos y ahora no, pero está feo unfollowearse". Un drama.

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